El empleo de sistemas de inyección cero, o antivertido, en instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo es uno de los aspectos que más dudas generan entre los profesionales del sector. Para resolverlas, recordemos que el RD de autoconsumo no exige en ningún momento el uso de estos sistemas. Y, para todo tipo de instalaciones de autoconsumo, el vertido de la energía generada a la red es perfectamente legal. De ahí surge la pregunta:
instalaciones autoconsumo
Decálogo de autoconsumo FV
El decálogo de autoconsumo fotovoltaico, elaborado por la Plataforma para el Impulso de la Generación Distribuida y el Autoconsumo Energético, refleja los beneficios que el desarrollo y la aprobación del RD de Autoconsumo y Balance Neto conllevan para el país y para la sociedad.
Cuatro configuraciones de autoconsumo FV. Parte 2/2
Las dos últimas configuraciones posibles son:
3ª configuración:
También se puede instalar un sistema de reducción de potencia aunque con esto no favoreceríamos un consumo eficiente de la energía. Según la imagen publicada a continuación, si el contador (1) mide un bajo flujo de corriente en la vivienda (5) (prefijado un umbral en el PLC) el PLC (2) manda una señal a la Webbox (3) (1-100% reducción de potencia). Los inversores (4) reducen su potencia activa. Tan pronto como el flujo de corriente de la vivienda supera el umbral (por ejemplo, la máxima potencia del sistema fotovoltaico) el PLC ya no vuelve a enviar la señal de reducción de potencia. Este sistema ya está disponible.
Ejemplo de instalación 3ª configuración (Fuente: SMA)
Cuatro configuraciones de autoconsumo FV. Parte 1/2
A día de hoy, según redacta el IDAE en el documento «Referencias sobre autoconsumo de energía eléctrica en la normativa vigente» de febrero de 2012 el autoconsumo es legal. Desde Krannich Solar, sugerimos varias configuraciones para optimizar este tipo de instalaciones fotovoltaicas.
1ª configuración:
Recomendamos la instalación de energía solar con microinversores para recortar el gasto de consumo eléctrico modularmente intentando satisfacer los consumos mínimos de una vivienda como puede ser el de una nevera o los standby de productos electrónicos instalados en el hogar.