Toda tecnología, incluida la solar, necesita de un periodo de adaptación antes de alcanzar su plena madurez. Cuando esto sucede, surgen nuevas aplicaciones como el PV Heating, o PV Thermal, que aprovecha la energía fotovoltaica para generar calor y calentar agua.
La fotovoltaica está hoy completamente consolidada en la mayoría de los países europeos, donde se ha apostado de forma explícita por el autoconsumo, aprobando una ley que lo regulariza y dando facilidades a los ciudadanos para que generen y consuman su propia energía solar, con el objetivo de construir un futuro más verde para todos.